Rapún se haya en la margen derecha del río Gállego, a unos 835 m de altitud en la Val Estrecha, cobijado del viento por las “rallas”.Las rallas de Rapún son formaciones geológicas verticales de roca arenisca, de gran envergadura, que actúan como una defensa natural frente a los elementos.
La localidad de Rapún es un ejemplo claro de la arquitectura popular de Serrablo. Podemos observar fachadas balconadas que se alimentan de luz, techumbres coronadas con chimeneas troncocónicas, donde el humo nos indica que hay vida en su interior. Para adentrarnos en el mismo, debemos pasar a través de decorados portalones desde los que llegamos a los típicos patios de estas construcciones. A ello hay que unirle la existencia de otras edificaciones anexas, como pueden ser las cuadras y los hornos de pan.
La iglesia románica de San Félix (s. XII) es la única edificación “valiente” para abrirse paso entre las murallas de arenisca. Su particular simbiosis de arquitectura y geología hace de Rapún un lugar de visita obligada.
Esta construcción parroquial, de carácter religioso-popular, tiene una nave rematada por un ábside semicircular. Es muy reseñable el mimo y la paciencia de la elaboración del suelo, que este trabajado con cantos rodados generando mosaicos de diversas formas geométricas y hermosos florales, de tres y cinco pétalos. Al fondo de la nave, hay coro alto de madera, con elaborada decoración del madero que lo sustenta que imita la decoración del suelo de la iglesia.
Otra manera de disrutas de las rallas de Rapún es realizar una exigente ruta en bicleta de montaña. Esta bonita ruta atraviesa los pueblos de Rapún, Avena e Ibort, por un entorno con unas vistas variadas y muy cambiantes, atravesando pinares de repoblación, zonas acarcavadas y pequeños retazos de bosque autóctono.
Podeis mirar la ruta en el siguiente enlace.
Os esperamos en Rapún.